Dios de la Reforma, te damos gracias por tu perdón y bendición. Oramos por nosotros mismos y por tu Iglesia en todo el mundo. Llénanos con un espíritu abierto a Tu Espíritu, para escuchar y recibir tus promesas, y para mantener nuestro pacto contigo. Donde seamos corruptos, purifícanos. Donde estemos equivocados, dirígenos. Donde estemos necesitados, provéenos. Donde estemos divididos, reúnenos.
En su Palabra nos ha prometido Un descendiente de David, el rey; Un gobernante humilde, manso...
Llegando al 31 de octubre, Día de la Reforma, recordamos uno de los himnos emblemáticos de Martín...
Creo en Dios que me ha creado a mi y a todas las criaturas, que me ha dado y sostiene mi cuerpo...
El presente trabajo fue realizado por el grupo de jóvenes de la Sociedad de Esfuerzo Cristiano...