Red de liturgia

CLAI - Consejo Latinoamericano de Iglesias

Inicio | Quiénes somos | Enlaces

24 de abril de 2009

Yo soy testigo: \"Dios es amor\" - Testimonio

Autor/es: Cristina Dinoto

Visto: 3424 veces

Se llama Crescencia, descendiente de Mapuche, de no mucho hablar, no tiene más de 45 años, morocha, pelo negro y grueso, muy largo y siempre brillante madre de 5 hijos ya grandes, todos pasaron la adolescencia casi.

- Yo les di libertad para que estudien, ¿vio pastora? Yo siempre hice sola todas las cosas de la casa para que ellos tengan tiempo para estudiar. Y ellos, algunos estudiaron hasta 5to. año y otros dejaron para ir a trabajar. Yo le dije a mi marido -dice- llevaste a los dos más grandes a trabajar con vos al campo y les diste la plata que se habían ganado, entonces le agarraron cariño a la plata y dejaron el estudio con los otros no, ellos tienen que estudiar, después que elijan.

Como su marido tiene changas y ella tiene a su cargo un menor, trabaja para el Plan Social de Jefas y Jefes de Hogar desocupados, en el Taller Integral de mujeres que la Iglesia tiene en el barrio. Este año cuando empezaban las clases, hablamos de las que no sabían leer ni escribir y descubrí que eran cuatro mujeres que había en el taller las que no sabían leer ni escribir. Entonces las ayudé a decidirse para asistir al Centro de Alfabetización para adultos.

Doña Crescencia, mujer evangélica, viene a visitarme a casa de vez en cuando y me trae el cuaderno con lo que va aprendiendo, para que lo vea.

Pero el Señor hoy me tenía preparada una sorpresa, cuando vino (4°C bajo cero) hicimos café calentito y nos sentamos a conversar. A veces me pregunta cosas de La Biblia, otras oramos juntas por nuestras cosas... y ésta mañana, antes de irse, guardó su cuaderno de clase y sacó de su viejo bolsito negro un billete de $10 para regalarme.

- Esto es para usted Pastora, y que sea de bendición.

Ella venía de cobrar sus $150 del plan y me quiso hacer un regalo. Por supuesto que en su casa no tiene gas natural, ni casa de material, ni hablar de computadora o internet, pero ella me quiso regalar de lo que había ganado, y para que sea de bendición.

Me parece que yo estaba emocionada o conmocionada, la abracé y me abrazó y nada podíamos decirnos. Cuando me repuse, creo que el Señor me dio las palabras justas, no quería ofenderla diciendo no, pero tampoco me podía quedar con eso, sinceramente no sé muy bien lo que le dije. Ahora la que se emocionó fue ella y me miraba sin articular palabra. Volvimos a abrazarnos, nos dimos la bendición y quedamos en encontrarnos la próxima semana, como siempre.

Este cariño que el Señor siempre acerca a mi vida en el momento apropiado, siempre también viene de los más humildes, de mis hermanos más pequeños. Aquellos por los que racionalmente, uno piensa que "tiene que pedir al Señor por ellos". Y que con un gesto de corazón, sin razonar, te muestran a DIOS en su corazón.

DIOS ES AMOR y cuando pensamos dónde podemos encontrar ese amor hoy, en este tiempo, sólo tenemos que pensar en aquellos que, excluidos de los modelos económicos del mundo globalizado, DIOS guarda entre sus manos y pone en nuestro camino para mostrarnos su amor.

"Ruega al Señor tu DIOS que nos enseñe el camino que debemos seguir y lo que debemos hacer". (Jeremías 42:3)

Share

Palabras relacionadas

cuando, señor, tiene, siempre, dios

Atras