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24 de abril de 2009

Va Dios mismo en nuestro mismo caminar

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Audición del 22 de marzo del 2003

PRESENTACIÓN

Desde este sur de nuestro continente vemos un mundo donde, allá lejos, hay incendios cuyas mayores víctimas son civiles, y entre ellos niñas y niños y sus madres. Decisiones políticas tomadas en oficinas cómodas y equipadas se transforman para ellos en destrucción de sus hogares, en explosión en sus hospitales y escuelas, en encierros en lugares donde habita el temor y la inseguridad.

Nos preguntamos por qué, para qué, y la palabra de Dios nos responde desde la carta de Santiago

4.¿Saben por qué hay guerras y pleitos entre ustedes? ¡Pues porque no saben dominar su egoísmo y su maldad! 2 Son tan envidiosos que quisieran tenerlo todo, y cuando no lo pueden conseguir, son capaces hasta de pelear, matar y promover la guerra. ¡Pero ni así pueden conseguir lo que quisieran!Ustedes no tienen, porque no se lo piden a Dios. 3 Y cuando piden, lo hacen mal, porque lo único que quieren es satisfacer sus malos deseos.

¿Saben cuándo fue escrito esto? Pues hace casi dos mil años. ¿Por qué ,entonces, parece referirse a nuestros días? ¿Acaso no es egoísmo, y maldad, y querer tenerlo todo, y cuando no se puede conseguir de otra manera “pelear, matar y promover las guerra” una descripción acertada del proceso por el que se desencadena esta invasión?

Y, ¿no vuelve más doloroso este cuadro el hecho de que muchos de los que decidieron esta matanza para apropiarse de lo que quieren tener, en especial el petróleo, y la influencia política y económica en los países en cuyo subsuelo está este combustible que mueve los motores de la producción de bienes y alimentos que todo el mundo necesita, que muchas de estas autoridades dicen creer en esta Palabra y compartir la fe de Cristo, basada en esta Escritura? ¿Es que acaso se puede matar en nombre de Jesús? ¿Se puede condenar a niñas y niños, y mujeres y hombres a morir bajo las explosiones que envenenan el aire, y el agua y el suelo, y decir que se asesina para cumplir con un deber cristiano de luchar contra el mal?

NO!

Los cristianos rechazamos todas las guerras y nos negamos a utilizar el nombre de Dios en vano,diciendo que en su nombre se puede matar, robar, envenenar lo que Dios ha creado para disfrutar, para vivir.

Sí.

Mirado desde este lugarcito del sur de nuestro mundo, frente a un micrófono que se abre con democrática libertad de expresión para proclamar el mensaje de amor y de paz, de perdón y de reconciliación, la guerra desatada con la invasión a aquellas tierras que entonces se llamaban Babilonia, y Caldea, donde hace mucho tiempo caminaron los patriarcas, los profetas, los poetas bíblicos que crearon la historia de la Torre de Babel, está contra la voluntad de Dios y las consecuencias de la misma no pueden ser sino dolor y muerte para muchos. Porque “la paga del pecado, es muerte. Tan cierto como que el cumplir la voluntad de Dios es vida, más cantidad de vida. Más calidad de vida”(Rom. 6.23).

Y mientras miramos la guerra allá lejos, sin dejarnos engañar con las mentiras de la propaganda- que los mismos que asesinan a las personas, asesinan a la verdad- miramos a nuestro alrededor, aquí mismo y entre nosotros vemos otras manifestaciones del pecado con el hambre, la falta de cuidado de los niños, de sus madres, de la falta de trabajo, de vivienda. Las iglesias hablamos de Dios cuando hablamos de su voluntad de amor para todos, mostrada en la vida de Su hijo, que vino para dar su vida por todos, para que todos tengamos vida, y vida en abundancia. Claro que hablamos de la vida eterna, y la vida eterna incluye este hoy y este ahora. El desempleo de ahora. La falta de vivienda de aquí y de ahora. Los problemas por falta de medicamentos aquí y ahora. Y el silencio de las iglesias aquí y ahora. Como si Dios nos hubiera mandado a hablar de religión, del cielo, de los ángeles y no del pecado de egoísmo, de ambición, de desinterés por esos niños de la calle que son como aquel niño que Jesús llamó un día en la calle para decirnos “Lo que hagan por uno de estos pequeños por Mí lo harán”

Sí.

Como cada semana ,hoy venimos a recordar que VA DIOS MISMO EN NUESTRO MISMO CAMINAR y te llamamos a volver a Dios, al arrepentimiento de los pecados, a renovar la relación con Dios como el Padre de Jesús, quien nos enseñó a vivir como hermanos. Como cada semana, hoy te invitamos a participar en nuestras iglesias de las reuniones de predicación, de las oraciones por la paz, por la paz que Jesús trae a la vida de las personas y de las naciones. Hoy venimos a invitarte a unirnos en el rechazo de la guerra, consagrándonos a trabajar por la vida, que es trabajar por la gente en sus necesidades espirituales, estimulando a los responsables para que busquen formas de crecer en el empleo, en las viviendas, en la atención de la salud, en una sociedad fraterna, solidaria, responsable unos por otros en cumplimiento del amor al prójimo, y con respeto a todos los credos y a los que no tienen credo, en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

MÚSICA “Paz ,mis hermanos, paz...”





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