Red de liturgia

CLAI - Consejo Latinoamericano de Iglesias

Inicio | Quiénes somos | Enlaces

24 de abril de 2009

Propuesa litúrgica para el domingo 8 de junio, Pentecostés

Visto: 1688 veces

Preludio

Oración de invocación

Oh Dios de la misma manera que tu Espíritu Santo resucitó a Jesús de entre los muertos. De la misma manera como derramaste el Espíritu Santo sobre los discípulos, derrama sobre nosotras y nosotros tu pueblo aquí reunido.

Ven Espíritu Santo, reanima Toda la Creación y empieza por Tu Pueblo. Espíritu Santo, construye tu comunidad y hazlo a través mío. Espíritu Santo, que sea la paz y el conocimiento de Dios en toda la tierra y empieza en nosotros.

Espíritu Santo, acerca tu amor y tu verdad a todo ser humano y
empieza con nosotros. Amén.

Cantamos del Cántico Nuevo Nº147 Ven, Santo Espíritu de Dios

Lectura antifonal

Soy feliz porque vivo.
Siento latir mi corazón.
Abro los ojos y puedo ver.
Siento el perfume de las flores y el sabor dulce de las frutas. ¿A quién le debo todo esto? ¿Quién formó mi cuerpo y me dio este rostro?
¿Quién me dio la voz?
¿Quién hace que me duerma por las noches y me despierte de mañana? "¡Cuántas cosas has hecho, Señor! Todas las hiciste con sabiduría
¡la tierra está llena de todo lo que has creado!" (Salmo 104:24)

Todos los días tengo qué comer, vestidos que me abrigan, un techo que me protege de la lluvia.
No tengo todo lo que desearía tener, pero tengo lo necesario para vivir.
Tengo manos con las que puedo hacer algo, tengo una mente capaz de pensar,
crear, investigar.
¿A quién le debo todo esto?
¿Quién me da alimento y abrigo?
¿Quién me da la alegría que necesito para vivir?
¿Quién cuida de mí y me ama?
"Todos esperan de ti, Señor, que le des su comida a su tiempo. Tú les
das, y ellos recogen abres la mano, y se llenan de lo mejor."

(Salmo 104:27-28)

El pan alimenta mi cuerpo,
pero necesito algo más: ánimo de vivir, darle un sentido a mi existencia,
tener un objetivo y reconocer un camino.
Necesito de alguien que me acompañe, que me consuele en mi tristeza y debilidad, que me acepta como soy, que me conoce.
¿Quién me da el apoyo que necesito?
¿Quién me muestra el camino que pueda recorrer?
¿Cómo conservar la alegría y la esperanza?
"Mientras yo exista y tenga vida, cantaré himnos al Señor mi Dios.
Quiera el Señor agradarse de mis pensamientos, pues sólo en
Él encuentro mi alegría."

(Salmo 104: 33-34)

Dios no nos abandona.
Por eso podemos cantar con alegría.
Porque nos dio la vida, y la cuida en sus manos de Padre y Madre,
podemos alabar y adorar a Dios...

Cantamos del Cancionero Abierto Nº111 Canten al Señor

Del Cancionero Abierto Nº207 Te alabaré, Jehová

Cantamos: Santo, Santo
Santo, santo es el Señor Dios de la vida es,
Su gloria inunda los cielos,
Su gloria inunda la tierra, su gloria inunda mi vida. Santo es el
Señor.

Lecturas Bíblicas
Hechos 2:1-21
Romanos 8:22-27
Juan 15:26-27 y 16:4-15

Mensaje

Cantamos del Cancionero Abierto Nº20 Creo en Dios

Momento de Gratitud y de Intercesión

Cantamos del Cancionero Abierto Nº188 Mi corazón está agradecido

Presentamos nuestras ofrendas y diezmos

Celebración de la Cena del Señor

Momento de confesión

Oremos en silencio

Espíritu Santo, acude en ayuda de nuestra debilidad.
Espíritu Santo, acude en ayuda de nuestra impaciencia.
Espíritu Santo, acude en ayuda de nuestra impotencia.
Espíritu Santo, acude en ayuda de nuestra incredulidad. Espíritu Santo, acude en ayuda de nuestra infidelidad. ¡Ven, Espíritu Santo, ten piedad de nosotras y de nosotros,
renuévanos y fortalécenos para ser tus testigos en el mundo¡ Amén.

m. Arriba los corazones
c. Los levantamos al Señor
m. Demos gracias al Señor
c. Dárselas es digno y justo
m. Es verdaderamente digno y justo y de nuestro deber darte gracias
siempre a Ti, Padre Santo, Dios todopoderoso, porque nos diste el
mundo en que nos pusiste a vivir, nos enseñaste a vivir por medio de
la ley y los profetas al llegar la plenitud de los tiempos nos diste
a tu propio Hijo Jesucristo para nuestra libertad. Él nos mostró en
carne propia lo que vale la vida y cómo es bueno vivirla.

c. Sí, Señor, todo esto y mucho más nos viene de Ti.

m. Por medio de tu Santo Espíritu diste poder y ánimo a hombres y
mujeres apóstoles y a quienes nos precedieron en el camino de la fe,
para que junto con tantos hermanos y hermanas, seamos una Iglesia .

c. Nos juntaste como un solo pueblo para servirte y trabajar por tu
Reino

m. El Señor Jesús la noche que fue entregado, tomó en sus
manos el
pan, lo partió y dijo este es mi cuerpo partido por Uds. Coman todos
de él y háganlo en memoria mía. (el/la ministro parte el pan)

c. Después de cenar tomó en sus manos la copa, la bendijo y dijo:
esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, beban todos de ella y
háganlo en memoria mía. (el/la ministro levanta la copa)

m. Señor, Tú te entregaste por nuestra redención
c. Ahora nos entregamos a ti en amor al prójimo y a tu Iglesia. m. Señor queremos servirte c. Toma nuestros dones y conviértelos en semillas de tu Reino m. Señor, queremos ser fieles a tu llamado c. Toma nuestros pequeños ministerios y conviértelos en señales de tu
presencia en este barrio.

m. Señor cumple tu voluntad en nuestras vidas
c. Y anunciaremos tu nombre, te serviremos en el necesitado,
consolando y animando al caído.
m. Con todo tu pueblo, con las piedras vivas que nos precedieron en
el camino de la fe, y los fieles que levantarás hasta que vuelvas en
gloria, te alabamos cantando:

Santo, Santo, Santo, mi corazón te adora
Mi corazón te sabe decir, Santo eres Señor

Oración de consagración
Dios de amor, que te entregaste en tu Hijo por nuestra redención,
pedimos la presencia de tu Santo Espíritu sobre nuestras vidas y el
pan y el vino que hoy compartimos.
Por Su poder, haz que estos dones sean comida y bebida de salvación,
tu cuerpo y tu sangre benditos.
Queremos renovar nuestro pacto contigo y te pedimos que lo confirmes
con tu amor.
Danos tu Espíritu, para que sople como poder renovador en nuestra
Iglesia, nos santifique y nos comprometa en el anuncio de Tu Palabra,
en la acción solidaria y en la presencia profética, como señales de
tu Reino.
En Jesucristo nuestro Señor. Amén
Cantamos del Cancionero Abierto Nº198 Calipso de Comunión

Bendición

Dios de poder, Que la audacia de tu Espíritu nos transforme, Que la
dulzura de tu Espíritu nos dirija, Que los dones de tu Espíritu nos
capaciten para servirte y adorarte ahora y siempre Por medio de
nuestro Señor Jesucristo. Amén.

Propuesta de la Iglesia Metodista en Mar del Plata (Argentina) © Red de Liturgia y Educación Cristiana CLAI-CELADEC
Share

Palabras relacionadas

santo, espíritu, señor, dios, nuestra

Atras