Autor/es: Amós López Rubio
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Oración basada en Marcos 12, 38-44
(Amós López Rubio, Cuba)
Dios de amor, venimos ante ti con humildad y sencillez de corazón.
No queremos los primeros asientos,
pero sí queremos escuchar con claridad tu Palabra.
No queremos ser el centro de la atención,
pero sí queremos prestar atención a tu voz, a tu llamado,
a la necesidad que nos rodea.
No nos preocupamos por asegurar un lugar en tu mesa,
porque tu mesa es una mesa abierta para todos y todas.
No queremos pronunciar largas oraciones,
solamente queremos decir la palabra más precisa y sentida.
No queremos darte de lo que nos sobra,
sino entregarte lo mejor, lo que somos.
No queremos que nos saluden con respeto,
que nos hagan reverencia;
queremos más bien respetar y reverenciar la vida,
en la cual tú te manifiestas,
en la cual tú, también hoy,
vienes a nuestro encuentro. Amén.
(puede ser utilizada para comenzar el culto o para preparar el momento de la proclamación de la Palabra)