Red de liturgia

Lo que sigue es la oracion de intercesion preparada para el Culto de Envio de la Asamblea de Mision Mundial y Evangelismo en el Areopago, Atenas, el proximo domingo 15 de mayo

Con todo tu pueblo clamamos: Ven Espíritu Santo, sana y reconcilia!!

Señor, Tú que escuchas los clamores de paz de tu pueblo: danos la paz, ayúdanos a superar la violencia que se impone en hogares, barrios, ciudades, entre países y regiones. No permitas que la violencia y la guerra enseñoree sobre la vida.

Con todo tu pueblo clamamos: Ven Espíritu Santo, sana y reconcilia!!

Señor, Tú que escuchas los clamores de unidad de tu pueblo: pedimos por las personas, comunidades, iglesias y pueblos que no entienden que Tú nos llamas a estar unidos en tu hijo Jesucristo. Tu Santo Espíritu nos ayude a reconocer y aceptar nuestras diferencias para hacer de esta gran casa en que nos pusiste a vivir un mundo fraterno.

Con todo tu pueblo clamamos: Ven Espíritu Santo, sana y reconcilia!!

Señor, Tú que escuchas los clamores por sanidad de tu pueblo: muestra tu misericordia y poder sanando y liberando. Ayúdanos a anunciar tu perdón y promesa de nueva vida. Protege a tus criaturas: niños, niñas, jóvenes, mujeres y hombres que necesitan de tu presencia restauradora.

Con todo tu pueblo clamamos: Ven Espíritu Santo, sana y reconcilia!!

Señor, Tú que escuchas los clamores de reconciliación de tu pueblo: muestra un camino donde no lo hay. Personas, grupos y países víctimas de odios y rencores necesitan ponerse en paz para que la vida sea reverenciada. Algunas veces son siglos de odio acumulado, otras un gesto o una mala acción basta para encender la mecha que todo destruye. No permitas que mal gobierne sus vidas. Sea tu paz la que una y hermane a quienes están quebrantados.

Con todo tu pueblo clamamos: Ven Espíritu Santo, sana y reconcilia!!

Señor, Tú que escuchas los clamores de tu pueblo, bendice el camino de unidad. Te pedimos por la próxima Asamblea General del Consejo Mundial de Iglesias, en Porto Alegre, Brasil en febrero próximo

Con todo tu pueblo decimos: Dios, en tu gracia, transforma el mundo. Amén