Red de liturgia

…“¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la Paz, de los que anuncian buenas nuevas”! (Romanos 10: 15)

Como agua que corre en un cántaro, calma, continua y transparente.
Esa es la Paz..
Como el pájaro que encuentra un árbol para poder hacer su nido y cantar todas las mañanas.
Esa es la Paz..
Como el sonido de los piecitos de tus niños, en el piso, cuando se levantan una mañana fría y corren a acurrucarse en tu cama.
Esa es la Paz.
Como la tibieza de un beso de aquellas personas que amas.
Esa es la Paz.
Como la emoción de un abrazo de reencuentro, de un abrazo de amistad
Esa es la Paz.
Como la brisa fresca que calma tu cansancio y te da un respiro en el camino.
Esa es la Paz.
Como esa noche que pudiste recostarte en el césped, mirando las estrellas y te las pusiste a contar y te quedaste dormido/a.
Esa es la Paz.
Como la magnificencia de la Creación que nos regaló Dios.
Esa es la Paz.

Y es sencilla, está al alcance de toda la gente.
No guarda rencor, ni se escuda con armas no se abusa de los débiles, ni atropella a la verdad.
Es un regalo de vida que te ofrece Dios, es un trabajo placentero que te invita a compartir, es una de las tantas lecciones de vida que nos ha legado Jesús.
Es la causa permanente de muchas personas que transitan la historia y es el desafío que nos hacemos hoy, para poder seguir despertando cada mañana.
¡Esa es la Paz!


Jesús amado, danos la fortaleza para seguir caminando detrás de tus huellas y ser mensajeros/as de la Paz. Amén.