Autor/es: Obed Juan Vizcaíno Nájera
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Muchos que no conocemos,
echan fuera demonios,
unos sanan y otros predican.
hablan en su nombre.
¿Acaso será competencia?
¿Se puede sanar en el nombre
de Jesús y estar en su contra?
No veamos amenazas y peligros
en todas partes y personas.
Quienes no están en nuestra contra,
luchan a nuestro favor,
son parte también del Reino.
Aprendamos a tolerar, respetar
y a amar al prójimo.
La vida es más que rivalidades,
más que odios y resentimientos,
mucho más que competencia
y dolorosas lejanías.
No estorbemos a quienes también
quieren trabajar de nuestro lado
en cualquier parte,
caminemos con quienes vemos
como menores e inferiores
a nosotros y nosotras,
a los que consideramos
extraños o desconocidos.
Es preferible lanzarnos al fondo
del mar con un gran lastre
atado a nuestro cuello,
que ser tropiezo a los más pequeños.
Cortemos de nuestras vidas
aquello que pueda ser ocasión
para tropezar y caer,
es preferible entrar al cielo
con todas nuestras fallas,
que perdernos completos
en el mundo con nuestro orgullo
e inútil prepotencia.
No hagamos nada por competencia,
rivalidades o contiendas,
vivamos con humildad,
amor y unidad.
Si somos la sal del mundo,
no podemos perder el gusto
y la sazón.
Sanemos juntos y juntas,
los resentimientos que nos alejan
y nos causan dolor.
Echemos unidos y unidas
de nuestras vidas los demonios
que nos dividen y enfrentan.
Vivamos siempre en paz,
amándonos como Dios manda,
para que el mundo crea,
para que haya verdadera armonía
entre nosotros y nosotras.
Rev. Obed Juan Vizcaíno Nájera
Maracaibo- Venezuela.
25 de Septiembre 2018.
