Autor/es: Maximiliano A. Heusser
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(Domingo de Ramos)
Levantamos nuestras manos, y en ellas, estas ramas.
Bendice, Dios nuestro, estas ramas de olivos.
Que nos recuerdan tu humildad manifestada en Jesús.
Bendice, Dios nuestro, estas ramas de olivos.
Que hacen evidente que nuestras intenciones humanas no siempre son las tuyas.
Bendice, Dios nuestro, estas ramas de olivos.
Para que humildemente aceptemos hacer Tu voluntad.
Bendice estas ramas, y con ellas a todo tu pueblo fiel.
Te lo pedimos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo,
Amén.
P. Maximiliano A. Heusser
